En la web «radioallimite» hemos visto un interesante articulo de Daniel EA4FFI , que habla de uno de los problemas que afrontan muchos radioaficionados que no pueden disponer de una instalación de antenas en el tejado…
Veamos sus métodos
A pesar de que a los forofos de la «
Radio al límite» lo que más nos gusta es estar constantemente experimentando con antenas discretas y compactas en los sitios más insospechados, hay que reconocer que es muy engorroso estar constantemente quitando y poniendo cables coaxiales para conectar nuestra antena experimental con los equipos de radio en el interior de la vivienda.
La ventana y el balcón son muchas veces nuestro banco de pruebas, sin embargo esto no es óbice para disponer de una o varias conexiones coaxiales permanentes, de modo que podamos ahorrar tiempo en nuestros montajes y sobre todo ganar en comodidad y rapidez.
Así pues, os presento dos métodos distintos para pasar coaxiales de forma discreta y haciendo un daño «mínimo» a la infraestructura doméstica
METODO 1 MÉTODO DEL CAJÓN DE LA PERSIANA
Se trata de pasar un coaxial no muy grueso (RG-58, Aircell-5 o similar) aprovechando la rendija por dónde se desliza la persiana y luego conducirlo al interior a través del cajón. Naturalmente, las posibilidades de este método dependerán del tipo de ventana y persiana que tengamos, sin embargo, creo que puede ser factible en la mayor parte de viviendas de construcción no muy antígua. Veamos un ejemplo:
a) Deslizamos el coaxial por la rendija (hay espacio suficiente para evitar el roce)
b) Conducimos el coaxial a través del cajón de la persiana sujetándolo con soportes adhesivos para bridas
c) Damos salida al coaxial con un pequeño taladro lateral en el cajón de PVC
d) Finalmente bajamos el coaxial junto a la ventana con ayuda de una canaleta adhesiva
Y listo, detrás de las cortinas queda totalmente invisible y en caso de que algún día queramos desmontarlo, únicamente quedará un pequeño taladro lateral en el cajón que se puede tapar fácilmente con cinta aislante o algo similar.
METODO 2 – MÉTODO DEL MICRO-TALADRO EN EL MARCO DE LA VENTANA
La técnica es evidente, se trata simple y llanamente de atravesar el marco de la ventana, pero claro, de una forma discreta y con mínimo impacto. En principio podría hacerse en cualquier tipo de ventana, pero hay que tener mucho cuidado con dónde se hace el taladro, pues tiene que ser un punto que no afecte a gomas, o mecanísmos y sobre todo que esté bien aislado del cristal, no sea que se rompa con la vibración del taladro.
La clave está en hacer un taladro de máximo 3 mm de diámetro. ¿Y qué coaxial pasamos por aquí? Pues RG-174 o RG-316, que tienen aproximadamente 2,5 mm de diámetro.
Este tipo de cable tiene bastante atenuación a partir de 30 MHz y la potencia máxima soportable es limitada y decreciente con la frecuencia, no obstante, esto no debe suponer un problema puesto que vamos a utilizar longitudes muy pequeñas:
- o bien un latiguillo de máximo 2 m para llegar hasta la radio en el interior
- o bien un tramo de 20 cm con dos conectores justo a cada lado de la ventana
De entre los cables mencionados, prefiero el RG-316 porque aguanta algo más de potencia y tiene un pelín menos de atenuación, pero sobre todo porque es algo más fino y tiene una cubierta más rígida.
En
ebay se encuentran fácilmente latiguillos de muchas medidas terminados con todo tipo de conectores, de manera que sólo tendremos que cortar la longitud adecuada y hacer un conector.
Veamos un ejemplo:
a) Hacemos el micro-taladro y deslizamos al exterior el cable justo para terminar en un conector que hará de «toma universal». En el interior, dejamos 1,5 m de cable para conectar directamente a la radio cómodamente desde el sillón.
b) En el exterior, colocamos un conector hembra al que podremos enchufar manualmente varios latiguillos que terminarán en diferentes antenas. En este caso el cable también atraviesa la guía de la persiana, pero podría quedar perfectamente apoyado en la losa porque este cable resiste bien el peso de la persiana.
c) El conector BNC-H se ha sujetado al laterial con una pequeña «L» de aluminio fijada a su vez con dos tornillos rosca-chapa.
d) En el interior, detrás de las cortinas, nadie se percata de lo que tenemos instalado.
Vemos una vez más que con un poco de imaginación es posible hacer instalaciones discretas, funcionales y económicas.